Testimonios

Luz y Esperanza

Testimonios reales sobre la sanación con reiki.

Sentí una calma profunda que alivió mi ansiedad y mejoró mi calidad de vida. Calmar el dolor del alma y el dolor físico no tiene precio.

Edith Aguilera

Camiri

Después de varias sesiones, noté menos dolor y más energía para enfrentar mis días con fortaleza y cuerpo renovado.

José Luis Remberto

Santa Cruz de la Sierra

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Mi mundo se derrumbó cuando empecé a dializar, mi cuerpo empezó a degradarse, mi pancita se llenaba de líquido, 8 kilos demás que tenía que cargar, y el peso no me permitía caminar. Cada mes era sufrimiento con la paracentesis. Hoy, gracias a PSICOREI ya no tengo líquido, puedo caminar y ya puedo sonreír, porque me siento con ánimos y con bienestar. El enfoque de PSICOREI transformó mi vida, me llenó de bienestar. La combinación de Psicología y Terapias holísticas me ayudaron a encontrar equilibrio y paz interior

Paqui B.

Me diagnosticaron cáncer de tiroides y me operaron para extirparme la tiroides. Después de la cirugía, tuve que recibir radioterapia para las células cancerosas restantes en la tráquea. Al final de este tratamiento de ocho semanas, cinco días a la semana, me quedé con muy poca voz y muy fatigada. A medida que empecé a recuperarme, sentí que necesitaba no solo recuperarme, sino participar activamente en mi recuperación.

Recibir Reiki ha marcado una diferencia en mi vida: en mi recuperación física y en mi actitud hacia la enfermedad. La radioterapia me ha dejado libre de cáncer hasta ahora, pero también me causó algunos daños en la garganta. Agradezco a mis tratamientos de Reiki y a mi camino espiritual con Dios el haberme permitido recuperarme y vivir con la esperanza de permanecer libre de cáncer y encontrar aventuras en cada rincón.

- Carolyn Lenhard, Wallace, Idaho

Milagro de Reiki con cáncer. Después de conectar a tierra a mi cliente, aún podía ver físicamente a Cristo de pie junto a su cabeza. Tardó más de lo normal en recuperarse después del tratamiento y no entendía cómo podía estar tan lejos de su cuerpo. Aún sentía como si lo tocaran y sanaran en la cabeza y los hombros. Aproximadamente una semana después lo vi. Había estado recibiendo tratamiento contra el cáncer y su especialista le dijo que su sanación no se debía a su hospitalización. Creo sinceramente que ambos experimentamos un milagro simplemente por entregarnos a Cristo.

- Brian Moten

Hoy me siento fantástica, probablemente mejor que en toda mi vida. No solo he sanado los problemas que les conté, sino también problemas de toda la vida como el eczema, la hipoglucemia y el dolor de espalda. He tomado todas las clases de Reiki y ahora puedo enseñárselo a otros. Sigo practicándome Reiki a diario.

A todos los que padecen enfermedades consideradas incurables según los estándares tradicionales, les digo: "¡No se rindan; nunca se rindan!". Hay una manera de que estén bien. Nuestro Dios amoroso quiere que todos vivamos en amor y bienestar. Rezo para que todos ustedes sean guiados por el camino de la salud como lo fui yo. Quizás el Reiki también sea su camino.

- DeAnn Upton

Reiki cambió mi vida. Me diagnosticaron cáncer de cuello uterino en etapa dos en marzo y actualmente estoy recibiendo radioterapia interna y externa, además de quimioterapia. Estoy en la tercera semana y me quedan tres semanas. Las autoterapias de Reiki, así como la sanación a distancia, me han ayudado a sobrellevar la situación con mínimos efectos secundarios y a mantener una actitud positiva. El Reiki me ayuda a vivir el día a día y, a veces, el momento a momento. Me ha ayudado a darme cuenta de que este cáncer es una sentencia de por vida, no de muerte. Tengo la oportunidad de conectar con otras personas con cáncer y ayudarlas a sonreír.

-Michelle Glines